Mark Zuckerberg revela presiones del gobierno de Biden para censurar contenido sobre COVID-19 en Facebook

La revelación de Zuckerberg sobre la presión del gobierno de Biden para censurar en Facebook agrava las preocupaciones sobre la libertad de expresión en redes sociales, recientemente intensificadas por la detención de Pável Dúrov en Francia.

En una reciente carta dirigida al presidente del Comité Judicial de la Cámara de Representantes, Jim Jordan, Mark Zuckerberg, CEO de Meta, afirmó que la administración de Joe Biden ejerció una presión indebida sobre Facebook para que censurara contenido relacionado con el COVID-19, incluyendo humor y sátira.

Este revelador documento, fechado el 26 de agosto de 2024, arroja luz sobre la compleja relación entre el gigante tecnológico y el gobierno de los Estados Unidos durante la pandemia.

En su carta, Zuckerberg expresa su agradecimiento por el interés del Comité en la moderación de contenido en plataformas en línea y menciona la cooperación de Meta en la investigación, habiendo proporcionado miles de documentos y facilitado entrevistas transcritas con una docena de empleados.

El CEO de Meta reconoce que, aunque sus plataformas están diseñadas para todos, promoviendo la libertad de expresión y la conexión segura entre personas, han tenido que enfrentar presiones constantes de diversos gobiernos, incluida la administración Biden. En 2021, altos funcionarios de la Casa Blanca presionaron repetidamente a los equipos de Meta para que censuraran contenido relacionado con COVID-19. Zuckerberg admite que cedieron a esta presión en algunos casos, lo que ahora lamenta y considera un error.

Zuckerberg también menciona un incidente relacionado con una advertencia del FBI sobre una posible operación de desinformación rusa en torno a la familia Biden y Burisma antes de las elecciones de 2020. En respuesta, Facebook decidió temporalmente disminuir la visibilidad de una historia del New York Post sobre acusaciones de corrupción contra la familia del entonces candidato presidencial Joe Biden. Sin embargo, al darse cuenta de que la historia no era parte de una operación de desinformación rusa, Zuckerberg reconoce que fue un error haber actuado de esa manera y que, desde entonces, han modificado sus políticas para evitar que algo similar vuelva a suceder.

A continuación, se presenta la traducción completa de la carta:


Meta

1 Hacker Way
Menlo Park, CA 94025
Estados Unidos

26 de agosto de 2024

El Honorable Jim Jordan
Presidente
Comité Judicial
Cámara de Representantes de los Estados Unidos
2138 Rayburn House Office Building
Washington, D.C. 20515

Presidente Jordan:

Aprecio el interés del Comité en la moderación de contenido en plataformas en línea. Como usted sabe, Meta ha proporcionado miles de documentos como parte de su investigación y ha puesto a disposición una docena de empleados para entrevistas transcritas. En virtud de nuestra cooperación con su investigación, agradezco la oportunidad de compartir lo que he aprendido de este proceso.


Se está hablando mucho en este momento sobre cómo el gobierno de los EE. UU. interactúa con empresas como Meta, y quiero ser claro sobre nuestra posición. Nuestras plataformas son para todos: estamos aquí para promover la libertad de expresión y ayudar a las personas a conectarse de manera segura. Como parte de esto, escuchamos regularmente a gobiernos de todo el mundo y a otros con diversas preocupaciones sobre el discurso público y la seguridad pública.

En 2021, altos funcionarios de la administración de Biden, incluida la Casa Blanca, presionaron repetidamente a nuestros equipos durante meses para censurar cierto contenido relacionado con COVID-19, incluyendo humor y sátira, y expresaron mucha frustración con nuestros equipos cuando no estuvimos de acuerdo. En última instancia, fue nuestra decisión si retirar o no el contenido, y asumimos nuestras decisiones, incluidas las decisiones relacionadas con COVID-19 que tomamos en nuestra aplicación de las normas tras esa presión. Creo que la presión del gobierno fue incorrecta, y lamento que no fuéramos más enfáticos al respecto. También creo que tomamos algunas decisiones que, con el beneficio de la retrospección y la nueva información, no tomaríamos hoy. Como le dije a nuestros equipos en ese momento, siento firmemente que no deberíamos comprometer nuestros estándares de contenido debido a la presión de cualquier administración en cualquier dirección, y estamos listos para resistir si algo como esto vuelve a suceder.

En una situación separada, el FBI nos advirtió sobre una posible operación de desinformación rusa sobre la familia Biden y Burisma en el período previo a las elecciones de 2020. Ese otoño, cuando vimos una historia del New York Post informando sobre acusaciones de corrupción que involucraban al entonces candidato presidencial demócrata Joe Biden y su familia, enviamos esa historia a verificadores de hechos para revisión y la redujimos temporalmente mientras esperábamos una respuesta. Desde entonces, se ha dejado en claro que el informe no era desinformación rusa y, en retrospectiva, no deberíamos haber reducido la visibilidad de la historia. Hemos cambiado nuestras políticas y procesos para asegurarnos de que esto no vuelva a suceder, por ejemplo, ya no reducimos temporalmente la visibilidad de contenido en los EE. UU. mientras esperamos a los verificadores de hechos.


Este documento destaca la complicada relación entre Meta y las presiones gubernamentales durante un período crítico, subrayando los desafíos que enfrentan las plataformas de redes sociales en la gestión del contenido mientras intentan equilibrar la libertad de expresión con la responsabilidad social.

La revelación de Mark Zuckerberg sobre la presión ejercida por el gobierno de Biden para censurar contenido en Facebook se suma a las crecientes preocupaciones sobre la libertad de expresión en las redes sociales, que recientemente se intensificaron con la detención de Pável Dúrov, cofundador de Telegram, en Francia. Estos eventos subrayan la delicada situación de las plataformas digitales, donde las tensiones entre control gubernamental y libertad de expresión parecen estar en su punto máximo. La detención de Dúrov y las afirmaciones de Zuckerberg sirven como recordatorios alarmantes de la fragilidad de la libertad en el espacio digital, y la urgente necesidad de protegerla frente a las crecientes presiones políticas.

FM del Este 100.5

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