Cómo afectan los pesticidas y herbicidas a los agricultores

Los pesticidas y herbicidas son químicos que causan cáncer son un riesgo en nuestros alimentos, pero son un riesgo aún mayor para las personas que los cultivan.

En las últimas décadas, miles de estudios han revelado las consecuencias negativas de los pesticidas y herbicidas en la salud humana y planetaria. Pero pocas personas, incluso entre los que compran productos orgánicos, piensan en quiénes corren más riesgo.

Según un  informe publicado en junio por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) , el 81,4% de los estadounidenses mayores de 6 años dieron positivo en niveles altos de glifosato, un herbicida relacionado con el cáncer.

Tres meses después, otro estudio, realizado por un grupo sin fines de lucro dedicado a la salud infantil,  encontró niveles detectables de glifosato en el 95,3 por ciento de los almuerzos de las escuelas públicas analizados. Las cantidades más altas fueron en tacos suaves y pizza.

Una investigación de Mississippi  publicada en 2014 mostró que el glifosato era el nuevo herbicida predominante detectado tanto en el aire (86%) como en la lluvia (77%) ya en 2007.

Cura para un asesino común (maleza)

El glifosato, el ingrediente principal de Roundup, es muy eficaz para eliminar las malas hierbas. Sin embargo, el herbicida también interfiere con la relación simbiótica entre las bacterias beneficiosas del suelo y las raíces de las plantas. Esto da como resultado cultivos alimentarios que son deficientes en los nutrientes que los humanos necesitan para una salud óptima.

Es por eso que muchos expertos en salud, incluidos médicos funcionales y nutricionistas, instan a sus pacientes a comprar alimentos orgánicos. Cuando los alimentos se cultivan sin pesticidas ni herbicidas y no contienen glifosato, son más nutritivos.

La buena noticia es que la demanda de alimentos orgánicos ha aumentado tanto que la mayoría de los supermercados ofrecen a los consumidores al menos una marca genérica asequible.

La mala noticia es que, aunque es más fácil y asequible que nunca comprar alimentos orgánicos, la mayoría de los estadounidenses todavía compran alimentos no orgánicos. Si bien la demanda de alimentos orgánicos parece estar aumentando, el Departamento de Agricultura aún estima que las ventas de alimentos orgánicos representan solo alrededor del 4 por ciento de todas las ventas de alimentos en los Estados Unidos.

Hay muchas razones por las que la gente no compra productos orgánicos. Según la  Fundación de Investigación de Agricultura Orgánica , la razón número 1 es el costo. Muchas personas también dicen que no pueden encontrar alimentos orgánicos en su área. Los desiertos alimentarios en las áreas urbanas hacen que esto sea especialmente desafiante.

Al mismo tiempo, incluso los consumidores más acérrimos de frutas, verduras , carnes y productos envasados ​​cultivados orgánicamente suelen comprar flores y plantas decorativas cultivadas de forma convencional.

Después de todo, si no lo estás comiendo, ¿por qué comprar orgánico?

He aquí por qué: cada trabajador agrícola expuesto al glifosato tiene un mayor riesgo de linfoma no Hodgkin, insuficiencia renal, enfermedad de Parkinson y demencia, entre otros problemas de salud.

De hecho, evidencia científica reciente, de estudios realizados mucho después de que se aprobara el uso del glifosato en el cultivo de alimentos, muestra que este herbicida es un factor importante en varias enfermedades debilitantes, incluidas enfermedades neurológicas, metabólicas, autoinmunes, reproductivas y oncológicas.

El glifosato causa cáncer de sangre

El linfoma no Hodgkin es un cáncer de la sangre que se desarrolla en los glóbulos blancos del cuerpo. Los síntomas incluyen agotamiento, sudores nocturnos, glándulas inflamadas, fiebre y pérdida de peso inexplicable, y la afección suele ser fatal.

Los científicos han estado publicando estudios sobre el vínculo entre la exposición a pesticidas y el riesgo de linfoma no Hodgkin durante más de 20 años.

Un estudio particularmente bien hecho, realizado por científicos en Suecia y publicado en 2008 , analizó la exposición a pesticidas en personas suecas entre las edades de 18 y 74 años. personas en comparación con los controles, y un riesgo tres veces mayor de padecer el tipo raro de linfoma no Hodgkin llamado leucemia de células pilosas.

Un metanálisis de 2019 , realizado por científicos investigadores de la Universidad de Washington y publicado en la revista Mutation Research, encontró que la exposición al glifosato aumenta el riesgo de linfoma no Hodgkin en un 41 %.

La Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer de la Organización Mundial de la Salud ahora afirma que el glifosato es probablemente cancerígeno para los humanos.

Cuando el asunto llegó a los tribunales, la evidencia fue convincente. En 2018, después de solo  tres días de deliberación del jurado, un jardinero de California recibió más de $289 millones de un tribunal que determinó que Monsanto, el fabricante de Roundup, no había hecho lo suficiente para advertir a los consumidores sobre el riesgo de cáncer. Aunque los abogados de la industria mantuvieron el caso enredado en los tribunales durante más de tres años y la cantidad que finalmente se le ordenó pagar a Monsanto fue reducida por otros tribunales, el veredicto en Johnson v. Monsanto Co. se  confirmó en 2020 .

En 2019, un tribunal de California ordenó a Monsanto que pagara 86,2 millones de dólares a una pareja que sufría de linfoma no Hodgkin después de usar Roundup.

Monsanto apeló, pero la decisión del tribunal inferior fue confirmada por la Corte Suprema de California en noviembre de 2021 . Desde entonces, más de 100.000 personas han presentado demandas contra Monsanto, según HerbicideFreeCampus.org .

Cualquier agricultor o trabajador agrícola que esté cultivando suelo tratado con glifosato y sus adyuvantes tiene un mayor riesgo de contraer linfoma no Hodgkin. Comprar todos los alimentos, flores y plantas orgánicos es una forma de mantenerlos seguros y protegerlos del posible desarrollo de cáncer.

Proteja a los trabajadores agrícolas de la insuficiencia renal

Los trabajadores agrícolas también deben estar protegidos contra la insuficiencia renal inducida por el glifosato y otros pesticidas y herbicidas. De manera alarmante, los trabajadores de la caña de azúcar en América Central están experimentando una forma inusual de enfermedad renal no relacionada con la diabetes. Muchos han estado muriendo de esta condición a una edad temprana.

Esta condición se ha denominado enfermedad renal crónica de etiología desconocida o CKDu. Un fenómeno similar está ocurriendo entre los trabajadores de los arrozales en Sri Lanka.

En estos casos, como se explica en un  estudio de 2019 (coautor de Stephanie Seneff), parece que el glifosato funciona de forma sinérgica con otro herbicida, el paraquat, para dañar los riñones.

La caña de azúcar no es un cultivo genéticamente modificado, pero a menudo se rocía justo antes de la cosecha con glifosato, que actúa como madurador para aumentar la producción de azúcar. Los trabajadores que cosechan la caña tienen una alta exposición al glifosato, especialmente durante la cosecha.

El gobierno de Sri Lanka prohibió el glifosato en 2015 en respuesta a esta clara evidencia de daño. Lamentablemente, debido a la presión de la industria agrícola, la prohibición se levantó en noviembre de 2021.

¿Factor principal en el deterioro neurológico?

Otra preocupación para los agricultores es el mayor riesgo de enfermedades neurodegenerativas debido a la exposición a pesticidas y herbicidas. Un  estudio de 2021 publicado en la revista Gerontology encontró una mayor prevalencia de demencia entre los trabajadores agrícolas en comparación con otros.

Si bien varios estudios han demostrado que el glifosato causa neuroexcitotoxicidad al excitar los receptores de glutamato en el cerebro, no fue hasta julio de este año que un estudio experimental definitivo publicado en el Journal of Neuroinflammation apuntó directamente a un vínculo con la enfermedad de Alzheimer.

Este estudio, en el que participaron ratones, mostró que el glifosato se infiltraba en el cerebro y aumentaba los niveles de un conocido agente inflamatorio, así como de la forma tóxica de beta amiloide, la proteína relacionada con el Alzheimer. Además, mostró que el glifosato es directamente tóxico para las células.

Los alimentos orgánicos son más seguros y saludables para sus hijos, su familia, los trabajadores que recogen sus cultivos y el planeta. Si va a los mercados de agricultores, puede encontrar aún más alimentos y flores locales cultivados orgánicamente a precios asequibles.

Si sus bolsillos se sienten apretados, hágase amigo de los granjeros en su área y encuentre una manera de hacer intercambios. Cultivar sus propias flores y vegetales de jardín, o unirse a un club o cooperativa de jardinería local, también lo ayudará a tener un suministro constante de alimentos saludables y hermosas flores.

Además, la investigación en curso está conduciendo a  soluciones tecnológicas creativas para el problema de las malas hierbas que no dependen de productos químicos tóxicos. Los alimentos orgánicos ya se han vuelto más asequibles a medida que aprendemos cómo enfocarnos en métodos agrícolas regenerativos y renovables que aumentarán el rendimiento sin dañar el ecosistema.

Debemos proteger a los agricultores de las enfermedades inducidas por pesticidas y herbicidas. Si todos dejamos de comprar alimentos y plantas de jardín cultivados convencionalmente, la demanda de estos disminuirá y los productos orgánicos no serán solo un lujo para los ricos.

Jennifer Margulis y Stephanie Seneff

Jennifer Margulis, Ph.D., es una escritora científica galardonada y colaboradora habitual de The Epoch Times. Stephanie Seneff, Ph.D. , es científico sénior del Instituto Tecnológico de Massachusetts y autor de “Toxic Legacy: How the Weedkiller Glyphosate Is Destroying Our Health and the Environment”, que se publicó recientemente en rústica.

Fuente: How Pesticides and Herbicides Affect Farmers

Traducido por Pablo de la Iglesia

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